No me gusta estar solo

El problema de muchas personas tímidas es que se recluyen y se quedan en casa cuando en realidad querrían estar haciendo otra cosa. Ellos dicen: «no me gusta estar solo» pero no son capaces de hacer nada para cambiarlo.

Estar solo a menudo es algo que no parece que podamos controlar. Querríamos hacer las cosas de otra manera pero no somos capaces de darle la vuelta a la realidad. A pesar de lo que pueda parecer a simple vista no todo el mundo es infeliz estando solo, sentirse solo no es lo mismo que estar solo.

Si tu problema es la timidez voy a recomendarte nuestro vídeo curso Cómo superar la timidez y ser sociable, con el que, a través de ejercicios, mejorarás la confianza en ti mismo y ganarás habilidad social.

Es habitual cuando escribimos este tipo de artículos recibir comentarios, muy interesantes, sobre cómo estos lectores se sienten cómodos y felices estando solos. Por supuesto que esto es totalmente posible. Nuestros artículos no van dirigidos, en este tipo de casos, a personas que se sienten felices y realizadas siendo personas solitarias, ya que como decía antes no es lo mismo sentirse solo que estar solo.

Ser solitario es algo totalmente normal, natural. Venimos al mundo solos y nos vamos solos, compartimos el trayecto vital con más o menos personas pero la vida es algo que se usa de forma individual. Nadie puede vivir la vida por ti ni tú puedes vivir la de nadie. Así que cuando uno se siente bien consigo mismo y prefiere estar solo que en compañía es totalmente aceptable. El problema no es lo que piensan los demás sino lo que piensa uno mismo.

Si para uno mismo no es un problema ir al cine solo sino que es algo que prefiere ya que elige la película y se concentra en ella, es igual de respetable que quien elige ir al cine en compañía de amigos, sin importar la película, sino el rato que pasarán juntos.

El problema llega cuando esta persona que va sola al cine siente que le gustaría hacerlo acompañado de otros pero algo le impide hacerlo. Ese es el problema, no que alguien prefiera ir solo al cine que con multitud de amigos o incluso en pareja.

El problema no es que muchos de vosotros, que nos leéis a pesar de ser felices siendo solitarios, disfrutéis de vuestra soledad y de la introspección, o la vida solitaria. El problema es que la mayoría de nuestros lectores llegan aquí porque se sienten solos, no les gusta sentirse así y necesitan que alguien les aconseje sobre cómo cambiar un poco esta circunstancia.

Pero nos parece genial que dejéis vuestra opinión, es muy bueno que una persona solitaria pueda leer que otra persona lo es y que se siente feliz con ello. Entre todos podemos dar puntos de vista diferentes y aprender cosas y crecer todos juntos con la experiencia.

Os animamos, pues, a dejar vuestra opinión en los comentarios, tanto si os gusta estar solos como si no os gusta estarlo. Eso sí, siempre desde el respeto, no permitiremos ofensas personales ni otro tipo de faltas de respeto.

Si tú eres de los que dice «no me gusta estar solo» puedes, como decía, tomar algún curso o hablar con algún coach y  tratar de cambiar un poco para que te sientas más cómodo y puedas relacionarte mejor con los demás.

Muchos de vosotros, que os sentís solos, tenéis, más que un problema de timidez, una circunstancia especial. Sois diferentes. Vuestros gustos, aficiones o lo que sea no acaba de encajar con los de la gente que se mueve a vuestro alrededor. Esto es lo que tratan de decir algunos de los comentarios que recibimos. Que ser diferente está bien y si para estar con más gente tenemos que renunciar a lo que somos o a lo que nos gusta, no siempre compensa.

En ese sentido tenemos dos opciones, que no tienen que ser excluyentes la una de la otra. En el punto medio está la virtud, dicen. Seguro que puedes trabajar para seguir siendo auténtico, disfrutar en ciertos momentos de tu propia compañía y en otros tener una vida más social.

Como digo no todo tiene que ser excluyente, en primer lugar deberías tratar de conocerte a ti mismo, saber qué es lo que quieres y qué es lo que te gusta y aceptarlo. Saberse reconocer algo distinto en algún aspecto a los demás no es malo, al contrario. No todos tenemos que ser iguales.

Aceptar también que no podemos gustarle a todo el mundo, igual que a nosotros no nos gusta todo el mundo. No debes sentirte inferior si a alguien no le gustas. Puede que en el fondo esa persona tampoco te guste a ti pero que la rabia que sientes cuando ves que no le gustas te haga no darte cuenta de que en realidad debería importante más bien poco.

Así que lo primero que hay que hacer es mejorar la autoestima de cada uno, aprender a aceptarse y saber reconocer qué es lo que nos gusta y qué es lo que no nos hace falta o directamente nos disgusta. Cuando sepas qué quieres podrás practicar tus habilidades sociales enfocadas a compartir tu tiempo y aficiones con gente que tiene unas necesidades similares a las tuyas.

¿Que tienes una afición muy rara y pocas personas comparten esa afición? Bueno, seguro que te gustan otras cosas, no te centres solo en una. Aprende a distribuir el tiempo entre todas las actividades posibles y si no se te ocurre nada que hacer busca a ver qué te llama la atención.

Si eres capaz de disfrutar de esos momentos que tienes para ti mismo antes de compartir tu tiempo con los demás, el miedo al rechazo no será tan grande. Pensarás ¿y qué? ¿qué pasa si me rechazan? Ayer estuve la mar de bien solo leyendo o yendo al cine, ellos se lo pierden.

Tu felicidad no depende de la compañía en la que estés sino de disfrutar el momento. El aquí y ahora. Si estás solo disfrútalo y recuérdalo la próxima vez que te de miedo conocer gente. No para echarte atrás sino para que el fracaso no sea una opción. ¿Que les apetece estar contigo? Genial. ¿Que no? Bueno, estar solo es aceptable, lo has comprobado. ¿Dónde está el fracaso?

Mientras, por supuesto puedes ir practicando, mucho, tus habilidades sociales, en el curso Cómo superar la timidez y ser sociable te daremos las claves necesarias para que aprendas a desenvolverte en público, luego ya dependerá de ti quedarte solo o salir con gente. Dependerá de lo que te apetezca.