Zona de Confort – Marcar el territorio en la mesa

La verdad es que los humanos son como animales. Todo lo que tocamos o cogemos lo consideramos nuestro y establecemos en ello un dominio territorial. Si compras una cocacola en un bar la poseerás como si fuera una parte de ti.

El juego de la mesa

Cuando estés sentado en una mesa puedes probar el siguiente juego para divertirte y ver como las personas poseen todo aquello que consideran que es suyo, aunque sea momentaneamente.  Si hay 4 personas sentadas en una mesa y cada uno tiene su servilleta, cocacola, cubiertos, vaso y plato. Prueba a mover su vaso o coacola por ejemplo.

Cuando lo hagas esa persona lo que hará inconscientemente es una de estas 4 cosas:

1. Colocar lo que has movido en su sitio
2. Beber
3. Coger lo que tú has movido
4. Pasar

Cualquier cosa de las 4 que haga desvelará algo de su personalidad y de quién o qué te considera a ti.

Colocar lo que has movido en su sitio

Para una persona que hace algo así significa que da mucha importancia a lo que es suyo, no es mucho de compartir o por lo menos le gusta que lo que es suyo, se sepa de sobras que es suyo

Beber

Cuando le mueves la cocacola de sitio al que está sentado en la mesa y este inconscientemente la coge y bebe, significa que defiende lo suyo con uñas y dientes. El gesto inconsciente de beber inmediatamente es cómo decir: «Ey, la cocacola es mía»,, lo que está haciendo en este caso es marcar territorio de un modo contundente.

Coger lo que tu has movido

Si simplemente coge lo que tu has movido significa que está diciendo: «Ey, ¡esto es mío!» pero lo está haciendo de un modo mucho menos agresivo que las otras opciones. Simplemente deja claro que es suyo. No es una marcación territorial violenta y tajante como puede ser beber o coger lo que tú has movido

Pasar

Si a alguien le cojes el vaso y pasa significa o que está muy metido en la conversación y ni siquiera su inconsciente se ha dado cuenta o que te respeta mucho y qué todo lo que es suyo es tuyo incondicionalmente. Esto se da en muy pocos casos ya que hasta para las personas más queridas queremos que nos pidan permiso cuando nos cogen algo o por lo menos que nos lo comunique de algún modo.

Cuando pasa puede ser también por muchas cosas, miedo a la otra persona (sería en situaciones de confrontación) que no marcas mucho tu territorio, eres más bien pasota… Todo depende según como es la persona, el contexto… Así qué no te lances a hacer juicios de forma precipitada, analiza todas las variables.

El juego de la mesa invadiendo el espacio personal

Ahora la modalidad que podemos comprobar es para ver la confianza que nos tiene la otra persona. Lo que tenemos que hacer es invadir su espacio en la mesa colocando algún objeto nuestro (preferiblemente un vaso, botella de agua, coca cola…) en su zona de la mesa. Y lo que hará es:

1. Dejarlo ahí
2. Volver a ponerlo en tu sitio

Dejarlo ahí o volver a ponerlo en su sitio

Si lo deja ahí es que esa persona te tiene confianza. Esto puedes probarlo para ver cuanta confianza te tiene un compañero de trabajo, conocido, suegro…

Dado que la zona de confort es lo que permitimos a las personas acercarse a nosotros y que cuando nos sentamos a una mesa poseemos lo que es nuestro (plato, porción nuestra de la mesa…) solo dejaremos invadirla a aquellos a los cuales tenemos confianza.

Por lo tanto, es un buen ejercicio para ver cuanto confianza nos tienen las demás personas.