Los maestros son los únicos que pueden enseñarte el arte de la seducción
¡Piiiiiiiip! Primer error, el único que debe enseñarte el noble arte de seducción eres tu mismo. Los libros de seducción te enseñarán a ser inmoral y gilipollaz, otros serán plagios de otros y unos pocos te enseñarán técnicas y cosas que tienes que hacer, que funcionan y son prácticas.
El primer error que comete alguien es pensar que necesita de ayuda ajena para aprender a seducir. Armado de un par de cojones y empezar a practicar en un pub, disco (dónde te sientas más cómodo) es lo único que te falta para enseñarte a ti mismo las habilidades de seducción.