Muchas veces cuando vemos a las personas más influyentes de nuestra sociedad, sabemos que tienen algo que cautiva a las masas, sabemos que ellos han llegado hasta donde están debido a un gran esfuerzo. Tienen el don especial de simpatizar a las demás personas, tienen una buena vibra por donde van. Y todo esto se reluce en las escenas, se reluce en las cámaras, en los conciertos, en los magnánimos eventos y los que gozan de este don poseen carisma escénico.
Hace poco asistí a un gran evento sobre Skateboarding en Lima. Aunque recién empiezo a practicar este deporte me animé a ir con unos 3 amigos hasta la otra parte de la ciudad en donde se concentraron miles de skaters con la misma afición. Muchos de ellos eran muy buenos montando la tabla, otros eran muy buenos haciendo piruetas en el aire, haciendo movimientos cuyos nombres eran el olie, shovie, flix, etc.
Estar allí con toda esa gente era cosa de otro mundo para mí. Era mi primera vez allí y me sorprendió la cantidad de gente que asistió al “Go Skateboarding Day”. Habían chicos de toda edad, inclusive chicas que practicaban este deporte.
De pronto, al cabo de un rato de habernos reunido en el lugar indicado, tuvimos que irnos al Skate Park tal como se había planeado. Y cuando llegamos allí pude ver lo que era el carisma escénico en esta área.
Yo siempre creía que el carisma escénico solamente se daba en las grandes pantallas de cine, en la televisión y los demás grandes medios, pero no es así. También se da en el mundo de los deportes tales como en el Fútbol, en el Basket, en el Tenis, etc.
De hecho, toda área que tiene una buena cantidad de aficionados, tiene su figura carismática. La figura que todos toman como inspiración, que todos toman como ejemplo a seguir ya sea por su historia de superación desde el momento que empezó hasta el día de hoy donde está ahora.
Y es que la persona que se destaca lo suficiente en el área de su afición favorita puede llegar a tener carisma escénico como también no lo puede llegar a tener; eso depende de cómo sea esa persona, pero lo primordial, lo importante es que sea experto en lo que hace.
El carisma escénico en el mundo del basket tiene como principal figura a Michael Jordan.
El carisma escénico en el mundo del futbol tiene como principal figura a Beckham, Ronaldhino, Kaká, Messi, etc.
El carisma escénico en el mundo de la política tiene como principal figura a Obama, John Kennedy, Alan García, etc.
El carisma escénico en el mundo de Hollywood tiene como principal figura a Tom Cruise, Jim Carrey, George Clooney, Simon Baker, La Roca, etc.
Y así te podría dar una lista tremenda de las figuras carismáticas que existen en el mundo actual pero volvamos a mi historia:
Estaba yo allí contemplando a los mejores skaters de Lima haciendo las mejores piruetas que, por cierto, eran muy peligrosas, y cuando se veía una pirueta que realmente impresionaba los demás gritaban en ovación: “Oooohhh…”
De pronto apareció uno que se creía bueno pero que casi nunca acertaba en sus maniobras. Los demás lo rechazaban, incluso le tiraban botellas de plástico.
Me di cuenta inmediatamente de por qué no era tan querido por el público espectador que éramos cientos prácticamente.
Se nota cuándo alguien trata de impresionar a los demás. Cuando alguien sale a la escena para impresionar y no para ayudar genuinamente, no para actuar genuinamente, no para jugar genuinamente, no para luchar genuinamente entonces los demás notarán eso y querrán votarlo. Se ganará mala fama.
Para colmo si no te sale bien lo que estás haciendo, el público te odiará. Y esto es SUPER IMPORTANTE en el caso de que quisieras ganar carisma escénico. Tienes que tener en cuenta que tu principal objetivo NO es impresionar, ni concentrarte en cómo te verás en las cámaras, ni en la cantidad de aplausos que vas a recibir. Lo que realmente importa es hacer lo que tanto te apasiona concentrándote en ella de manera genuina y sincera.
Y es que si el público nota que tú haces lo que te apasiona con la mayor facilidad del mundo entonces tienes la mitad de ellos ganados.
A nosotros nos impresionan los cantantes que cantan con una voz tan angelical, que tocan la guitarra y sacan hermosas melodías casi como por arte de magia. Eso parece tener algo espiritual y parece un don divino pero no es así del todo.
Esto es gracias a muchos años de práctica, a muchas horas de entrenamiento durante el día. Eso es debido a mucha sangre, sudor y lágrimas.
Si te das cuenta, muchos son los que empiezan. Muchos son los que se animan a formar una banda, muchos son los que se animan a asistir a una escuela de teatro y ser actores, muchos son los que se animan a perseguir sus sueños pero muy pocos son los que resisten hasta el final.
Y es que cuando ya los vemos en la cima pensamos que ellos han nacido con un don especial, pensamos que han llegado allí como por suerte del destino pero la realidad es distinta.
En eso consiste el carisma escénico. Debes ser el mejor en lo que haces, luchar hasta llegar a donde quieres llegar y mostrar un genuino talento sin esperar los aplausos de los espectadores.
Ya que si rompes una de estas reglas se notará que sólo quieres llamar la atención y pronto te echarán a la vieja y polvorienta caja del olvido.
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Esto es solo para unos pocos privilegiados, también esta el tipo anticarisma al que todo el mundo ignora y desprecia sin motivo aparente.