No, este no es un artículo sobre aseguradoras o financieras que te guiarán de cómo llegar a tener una vida futura segura y exitosa económicamente hablando, y que te indiquen la prima que tendrás que pagar para obtener lo perdido. Este es un artículo que solo comentará en determinada forma nuestro actuar en la sociedad para determinar una vida segura, pero en términos de honra, moral y disciplina.
Cuantas veces nos han dicho que para tener «seguro nuestro futuro en la vida», debemos de estudiar esforzándonos al máximo y pasar todas las pruebas que se presenten, o que las fiestas y el libertinaje puede ser nuestra vía equivocada en la vida.
No deseo que se escandalicen antes de hora por favor, no es que vaya a decir lo contrario, solo deseo que analicemos algo. Desde que somos unos niños siempre nuestros padres o tutores nos han aconsejado y hasta casi con chaperones han «cuidado» y vigilado sigilosamente cada una de nuestras acciones, y puedo decir que han hecho un excelente trabajo de «agente 007» .
La razón de mi comentario es mencionar que las reglas todos las conocemos en mayor o menor grado, sabemos que existen y que si violamos una de ellas puede acarrear consecuencias posteriores. Está solo en nosotros el que las sigamos y las perfeccionemos de acuerdo a nuestros principios, que si están bien cimentados de seguro ningún temblor de error las derribará.
Pongamos unos pequeños casos, que tal si nosotros como jóvenes salimos de vez en cuando a una pequeña fiesta, eso está bien y es normal, incluso sabemos que en una fiesta siempre habrá una que otra copita de brindis, pero que tal si esos determinados brindis salen más a menudo y ya no se dan solo en las fiestas sino en todo tipo de reuniones e incluso en lugares de trabajo. Deseo terminar con un último ejemplo que quizá nadie lo ha tomado en cuenta, pero que es un fenómeno que ocurre a diario para quienes aman la tecnología y es el hecho de que cualquier persona teniendo un celular ultra nuevo que le costó casi tres meses de trabajo, mira otro nuevo que tiene mejor forma, suena lindo y que a más de ello tiene radio y cámara para video llamada.
Todas estas cosas mencionadas y muchas más se dan en la actualidad, pero centrándonos en los ejemplos dados podemos sacar los posibles resultados o mejor dicho, consecuencias. En el primer ejemplo pues es de notar que si no nos controlamos en cuanto a la bebida lo que hacemos es conseguir a largo plazo una cirrosis que puede llegar a matarnos, pero a menor plazo podríamos terminar mal si conducimos un auto en esas condiciones y nos llevamos con nuestros errores a personas inocentes. En el segundo caso, al tratar de ligar a muchas chicas nos ganaremos una no muy buena enfermedad, la pelea con algún buen amigo y lo peor desde mi punto de vista, nuestro desequilibrio mental por una falta de estabilidad emocional. En el tercer y último ejemplo simplemente hablo de consumidores compulsivos, tratamos de tener siempre más sin que lo requiramos; claro que necesitamos conversar y si está en nuestras manos, porque no desde un bonito celular con mensajería y un radio, pero de allí a exagerar el comprar uno más caro y de iguales características al que tenemos, solo nos puede llevar a tener un museo de celulares completamente nuevos de diferentes estilo, y creo que podemos estar dejando de adquirir cosas que pueden ser más importantes para nosotros y por tanto, la afección de nuestra economía.
Todos nos encontramos siempre latentes de caer en algunas de las circunstancias que he mencionado, pero si hemos recibido valores y principios por quienes nos han cuidado, creo que hasta por respeto y en honor a su memoria, si no es por nosotros mismos, debemos de llevar y asegurar nuestra vida con nuestras mejores acciones.