Hoy quiero hablar de liderazgo, algo de lo que hace unos días que no hablamos. De cómo se puede ser líder de distintas formas y nos vamos a centrar en el método de liderazgo llamado «de riendas sueltas», una comparación con el mundo equino, que si comprendéis os llevará a entender mucho mejor el tema del liderazgo. Pero como no todos sabemos montar a caballo ni todos los jinetes entienden la doma de la misma forma hoy vamos a explicar cómo liderar con las riendas sueltas, dejando los caballos de lado.
Existen varios tipos de líder, podemos encontrar a líderes muy autoritarios, a los que se suben las mangas de la camisa y participan siempre que pueden o aquellos que son participativos pero que dejan a sus subordinados realizar el trabajo y tomar decisiones. Un poco como tratan muchos padres de educar a sus hijos.
Da igual el tipo de liderazgo que quieras ejercer, para todos ellos deberás confiar en ti mismo y transmitir esa confianza para que los demás hagan lo mismo, es decir, que confíen en ti. Sobre liderazgo tenemos un vídeo curso que seguro que te resulta muy útil y consiste en aprender a tener carisma, sí, eso también se aprende, para transmitirlo en tu día a día como líder. Visita la página del curso Cómo liderar para más información.
Qué significa liderar con las riendas sueltas.
A diferencia de otros tipos de liderazgo que consisten en practicar con el ejemplo, en el caso de los líderes participativos o liderar con mucha autoridad en el caso de los líderes autócratas, el liderazgo con las riendas sueltas o liderazgo liberal consiste en saber transmitir la idea de algo por hacer y dejar a los demás resolver el problema.
Para que lo entiendas rápidamente, un líder que lidera con las riendas sueltas en un grupo de amigos actuaría de la siguiente forma:
Tienen un problema o una situación por solucionar y el líder dice algo parecido a: «tenemos que hacer algo para solucionar esto». No da ningún tipo más de indicación pero todos los demás se ponen a pensar ideas y a hacer propuestas para solucionar el problema. Por contra, el líder autoritario propondría una solución que no permite discusión y diría a cada uno de sus amigos lo que tiene que hacer para solventar el problema. El líder participativo pensaría junto a los demás, tal vez la primera propuesta fuera suya pero estaría dispuesto a escuchar y debatir las propuestas de los demás para encontrar la más interesante para el grupo.
En el caso de los líderes liberales, se permite libertad para tomar decisiones y se premia a aquellos que lo hacen bien y tienen iniciativa. Los líderes participativos esperan un poco lo mismo mientras que lo autoritarios frecuentemente no sabrán ver con buenos ojos las aportaciones de sus subordinados, que para eso él es el líder.
En el campo laboral un líder liberal sabe motivar a sus subordinados para hacer las cosas como más le convengan. Lo malo del líder participativo es que tiene un modo de hacer las cosas que muchos intentarán copiar por lo que no trabajarán de forma auténtica. Cada uno tiene su estilo y encontrarlo permite sacar el mejor provecho. Una misma situación puede ser resuelta de muchas formas diferentes, igual que a un mismo sitio se puede llegar por muchos caminos distintos. El problema de querer tomar siempre el mismo camino es que a veces podemos perder el tiempo y gastar demasiado esfuerzo en ello. Imagínate que el resto de caminos no presentan el tráfico del camino habitual o que estás en la otra punta, coger el camino de siempre implica dar un rodeo increíble.
Lo mismo pasa con cualquier cosa que tengan que hacer varias personas distintas. Cada una tendrá su forma de organizarse, su forma de pensar, unas habilidades que destacan por encima de otras… Dejar que cada uno haga las cosas a su manera permite obtener lo mejor de cada uno, y aún mucho más: aprender a solucionar las cosas de distintas maneras. O lo que es lo mismo conocer muchos más caminos para llegar al mismo lugar. Algo que puede ser muy útil y necesario en muchas ocasiones.
El líder que lidera con las riendas sueltas deja que cada persona de lo mejor de sí misma y sabe motivar a cada uno para que lo haga. No teme que le superen pues en su responsabilidad no están las formas sino los resultados y confía en que esos buenos resultados son gracias a su gestión. El líder debe gestionar y es necesario que aprenda a hacerlo.
Ojo, este tipo de liderazgo puede confundirse con «tener un morro que te lo pisas» y no se trata de eso, no se trata de que creas ser un líder y digas «aquí hay que hacer algo» para que los demás te solucionen el problema. Ser líder es mucho más que eso y pasa por ser el mejor gestionador pero también el mejor ejecutor en caso de que sea necesario. Un buen líder tiene capacidad para detectar los puntos positivos de sus subordinados pero también para formar y mejorar en los puntos negativos.
Un buen líder es aquel que sabe dar órdenes pero da libertad a cada uno para que las ejecute como quiera, y siempre asumirá el resultado del equipo, sea bueno o sea malo como propio. Un líder que lidera con las riendas sueltas jamás baja la mirada y pierde su objetivo de vista. Es aquel que sabe dejar libertad pero que controla cada uno de los movimientos del equipo para poder corregirlos cuando haga falta. Liderar con las riendas sueltas también implica saber decir «esto no lo estamos haciendo bien, vamos a cambiarlo» y entonces es cuando propone la solución que zanja el problema. Es un jinete que da libertad al caballo pero que está ahí cuando este quiere salirse de lo estipulado. No llevará las riendas en corto para aprovechar mejor las condiciones del equipo pero las tendrá suficientemente tensas para poder rectificar la trayectoria o frenar en cuanto sea necesario.
Liderar es mucho más que dar órdenes, ya te has dado cuenta leyendo este artículo. Implica saber dar órdenes pero también tener una personalidad que no permita que nadie dude de quien da las órdenes. Ser líder implica que todo el mundo asuma que lo es por ser el mejor y para eso es básico el carisma. Te lo contamos todo en nuestro curso Cómo liderar, con el que cambiarás tu forma de dirigirte a los grupos que dependen de ti, ya lo verás.