Hoy vamos a hablar de algo que para muchos puede ser lo mismo, para otros, las diferencias son sutiles, pero existen, y la mayoría de estas diferencias pasan por una valoración moral.
En primer lugar analizaremos qué significa influir.
Dice la Real Academia Española que el significado de influir es el siguiente:
Dicho de una persona o de una cosa: Ejercer predominio, o fuerza moral
Influir e influenciar son sinónimos. Significan exactamente lo mismo. Aunque hay gente que parece que ve un matiz positivo en influir y uno de negativo en influenciar. Esta creencia no es correcta. Son palabras que puedes usar en el mismo contexto y que tendrán el mismo significado.
A través de la influencia llegamos a la persuasión. La persuasión es el acto final, es lo que se persigue cuando tratas de influir a alguien en algo. También cuando le manipulas.
En nuestro libro-ebook Cómo manipular a cualquier persona, aprenderás técnicas para conseguir persuadir a alguien utilizando herramientas típicas de la manipulación, pero siempre aplicadas con una intención positiva. Creemos que persuasión y manipulación positiva son lo mismo. Así pues si te interesa este tema en mayor profundidad no dudes en comprarlo.
El problema es que para conseguir persuadir a otros mucha gente utiliza tácticas negativas. Define la Real Academia Española la persuasión como lo siguiente:
Inducir, mover, obligar a alguien con razones a creer o hacer algo.
Mientras que manipular es definido por la misma Real Academia Española del siguiente modo:
Intervenir con medios hábiles y, a veces, arteros, en la política, en el mercado, en la información, etc., con distorsión de la verdad o la justicia, y al servicio de intereses particulares.
La diferencia está clara.
Tenemos tres ingredientes principales:
Por un lado la influencia: que es algo que se ejerce sobre los demás y con la que podemos hacer que varíe su punto de vista. La influencia sería un ingrediente más en el cóctel de información que tiene cada persona a la hora de tomar una decisión. Puede estar influida por varias personas o ideas y algunas pesarán más que otras. Quien toma la decisión es la propia persona teniendo en cuenta todas las influencias.
Por otro lado tenemos la persuasión: que es el fin que perseguimos cuando estamos influenciando a alguien. La persuasión significa ir más allá, darle argumentos, razones para que cambie su manera de pensar y al final haga lo que nosotros queremos que haga.
En tercer lugar tenemos la manipulación: que es el uso de cualquier treta o arma para conseguir que alguien piense o haga lo que nosotros queremos.
En la manipulación todo es válido, en la persuasión no.
Vamos a ver ejemplos concretos, los vemos constantemente en política, por ejemplo.
Si en tu casa siempre se ha votado una opción política o tu pareja decide el voto antes que tú. Eso puede ser motivo de influencia. El hecho de que gente en la que confías tome determinadas decisiones puede hacerte decantar a ti en caso de duda.
Cuando los políticos realizan una charla delante de su público, organizada, estructurada, para tocar las emociones de la gente y al final acababan pidiendo el voto están intentando persuadir al público de que votarles es lo mejor. Por ello darán argumentos sobre su programa electoral, presentarán datos objetivos sobre determinadas situaciones y nos explicarán la soluciones que tienen previstas para ello.
En un mundo ideal, simplemente escuchando a cada uno de ellos o leyendo su programa electoral debería ser suficiente para poder tomar una decisión sobre a quién votar. Lo haríamos a quien tenga ideas que encajen mejor con nuestra manera de ver el mundo y las necesidades que creamos que tiene la sociedad en ese momento.
Pero como el mundo no es perfecto y la mentira es algo que abunda mucho más que la verdad la situación ante la que nos encontramos cuando hablamos de política es la siguiente:
Políticos que esconden datos para que sus propuestas parezcan mejores. Para ello manipulan la información y la presentan como creen necesaria para cambiar la manera de ver las cosas de la gente que les vota.
Si hay datos negativos respecto a su gestión los esconderán y nos contarán solo los positivos. Nos dirán que eso es todo. De modo que creamos que lo que nos están contando es cierto. Cuando hay mentiras de por medio siempre estamos hablando de manipulación.
Falsear datos, esconderlos, modificarlos o simplemente ignorarlos es sinónimo de manipulación.
Cuando los políticos se dedican a criticar al partido de la oposición en lugar de explicarnos su propio programa electoral nos están manipulando.
Piensa que si estuvieran orgullosos de su programa, seguros de lo que presentan y de lo que van a hacer, si no tuvieran nada que esconder nos hablarían de eso y tratarían de persuadirnos con argumentos. Pero cuando no lo hacen es que la única finalidad que tienen es ganar, para ello lo primero que hay que hacer es dejar mal al rival.
Además de no gastar energía defendiendo su propio programa electoral, en el que no deben creer mucho, se dedican a manipular la información sobre el partido de la oposición, dan datos erróneos que siempre achacan al otro partido y buscan solo lo negativo para resaltarlo entre el público.
Cuando alguien destaca las cosas negativas de otra persona no nos está diciendo que él es mejor (aunque lo intente) sino que no tiene nada bueno para enseñar y tiene que buscar lo negativo en el otro, aunque sea inventándoselo. Cosa que todavía pone más de manifiesto la manipulación.
A pesar de que las diferencias son tan claras y de que a priori todos reprobamos este tipo de comportamientos a menudo no hay otra solución para librarse de un manipulador que manipulándole a él mismo o al entorno, provocando que sus mismas armas sean las que le delaten. Para ello es básico conocer a fondo todas las tácticas que utilizan. De este modo sabremos cómo evitarlas cuando nos la quieran colar y podremos devolverle la jugada hablando en su mismo idioma.
Por ello te recomiendo nuestro libro Cómo manipular a cualquier persona en el que aprenderás a detectar los signos de manipulación, evitarás ser manipulado y aprenderás a persuadir de modo positivo a otras personas.
Esto genera mas dudas que respuestas y no por que uno no lo pueda entienda pero de que sirve manipular alguien o lo convenzas de igual manera te aburrirás de hacerlo y ya no sera divertido.