Convivencia en pareja

La convivencia en pareja es una de las cosas más difíciles a la hora de estar con otra persona y por supuesto es uno de los pasos decisivos que indica que la relación llega a buen puerto. Pero cuidado porque la convivencia en pareja es un arma de doble filo porque puede incluso destruir la relación si ambos miembros no están preparados.

La convivencia en pareja no es solo que dos personas se pongan a vivir y estén 24 horas al día abrazados y acaramelados en el sofá. Cuando quieras convivir con tu pareja olvídate de los ideales románticos y tópate con la realidad.

La convivencia en pareja implica responsabilidades que van más allá del amor. De hecho convivir en pareja es parecido a fundar una empresa. Imagina que coges a un amigo y fundáis una empresa. Si no tenéis claro el papel de cada uno la cosa va a fracasar miserablemente.

Habías intuido que tu novio era un poco machista pero no vas a ver la cruda realidad hasta que convivas con él y repantigado en el sofá te pida una cerveza y que se indigne si no se la traes. Y esto pese a que no trabaja y tú eres la única que aporta un sustento…

Sabías que tu novia era algo maniática pero no hasta el punto de que al convivir con ella todo tiene que estar como ella quiere y si no se enfada montándote un espectáculo. Los platos hay que lavarlos exactamente después de comer y no puede haber nada encima de mesas, sillas o en ningún sitio.

Si no conoces bien a tu pareja y sabes tratarla la convivencia en pareja puede ser una auténtica locura que acabe con la relación. El amor no es solo el color de los ojos o las curvas de tu pareja, cuando se pone a prueba el amor es con la madurez y la inteligencia. No solo debes estar con tu pareja sino que debes saber tratarla y entenderla.

Cuando cada uno vive en su casa la cosa puede hacerse más llevadera pero una vez convives con tu pareja conoces la parte más mala de la otra persona. Se acabo eso de vestir impecablemente para seducir, ahora te tocará ver a tu pareja en pijama, despeinada y sin arreglar. Eso de ser tan sumamente amable y atento/a para conquistarte también se acabo. «Quita esa mierda de ahí» o «No me toques los huevos» pueden ser expresiones a la orden del día.

La convivencia en pareja desata el lado menos afable y más salvaje de ti y de tu pareja. Una mujer con un cuerpo espectacular pero envidiosa, caprichosa y malcriada puede pasar por alto esos defectos fingiendo una sonrisa y con su cuerpo, pero una vez se meta en la convivencia en pareja y le demuestre a su novio que es insoportable una dura batalla tendrá que llevar a cabo el novio para no terminar de los nervios o romper la relación. Lo mismo puede ocurrir con ese hombre que en principio parecía tan afable y luego resulta que tiene graves problemas de egoísmo.

Pero cuidado, no cometas el error de asumir que toda la culpa está en tu pareja porque sino estarás siempre más solo que la una al ser imposible mantener una buena convivencia en pareja.

Lee las siguientes reglas para la convivencia en pareja que van a salvar tu relación:

Sois un equipo

Debes enfocar la relación de pareja como un equipo, tú debes verlo así y debes hacerle entender a tu pareja que es así. Lo que no puede ser son situaciones como el hombre estar sin trabajo, la mujer trabajar y encima hacer las tareas del hogar. Hay que repartir las tareas e ir aportando en un ámbito o en otro.

Si mujer y hombre trabajan pero el hombre hace más horas y es el que más sustento lleva, es normal que la mujer ayude más en tareas del hogar. Hay que manejar la relación para que la convivencia sea feliz.

Recuerda, tú no eres el árbitro, el juez o el capitán, eres un miembro del equipo y debes coordinarte bien con tu pareja, aunque si tu pareja se empeña en ser un tirano deberás hacerle entender el concepto de equipo.

Tú pareja no es tu sirviente

Esto debes tenerlo muy claro. Tu hombre no es el esclavo que trabaja de sol a sol para que tú puedas pagarte todos los caprichos y vestidos que quieras. Tú mujer no es la esclava que te hace la comida, te trae la bebida y que te sirve constantemente para tu deleite. Hay que entender en la convivencia en pareja que tu chico o chica no se ha ido a vivir contigo para satisfacer tus necesidades. Si crees que no has pegado un palo al agua porque tu pareja te mantendrá debes asumir que ha cambio tú tendrás muchas otras responsabilidades y cosas que hacer por tu pareja, además de que no es ético hacer ceder en todo a tu pareja.

Hay que ser muy consciente en mantener un nivel equitativo aproximado del 50% en el cual tú contribuyes a la convivencia en pareja y tu pareja lo mismo. Cuando en una pareja hay sirvientes la felicidad y el amor se deterioran.

Cada uno debe tener su espacio

Algunas personas enormemente ingenuas quieren vivir con su pareja porque creen que así podrán controlarla más e invadir más su intimidad. Si piensas eso te equivocas completamente. La convivencia en pareja sirve para compartir tiempo juntos y afianzar la relación pero no para controlar o para que tus celos obsesivos se deleiten.

Que convivas con tu pareja no significa que tengáis que estar pegados 24 horas al día. Tú pareja puede tener sus series favoritas y tú tus series favoritas. Puedes disfrutar tiempo leyendo mientras el otro ensaya unos pases de bailé. En una pareja se comparte pero no se entrega la libertad a otra persona ni sois dos siameses.

Se disfruta en la convivencia en pareja cuando sois un equipo, os respetáis, pasáis tiempo juntos pero también con vuestras aficiones sin necesidad de estar pegados. Estos son algunos de los consejos para la convivencia en pareja importantes que debes tener en cuenta.

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