Cómo ser un buen amigo: la confianza (1)

Vimos hace pocos días cómo ser un buen amigo. Hoy queremos hablar de uno de los pilares básicos de la amistad: la confianza. No puedes ser amigo de alguien si no confía en ti. Pero, cuidado, la confianza es algo que se gana poco a poco con el tiempo, y que se pierde muy rápido. Si traicionas la confianza de alguien puede que no te de una segunda oportunidad. Así que toma nota de cómo tienes que hacer para ganarte la confianza de alguien.

Como decía es algo que requiere tiempo y constancia. No vale ser una persona que se esfuerza por ganarse la confianza hoy y que mañana se le olvida. Tampoco vale para quien tenga prisa. Sí, de momento has demostrado ser una persona en la que se puede confiar, pero la gente muchas veces necesita varias demostraciones a lo largo del tiempo para tener claro que no se equivoca. Aún y así, cuántas veces te ha fallado un amigo precisamente por traicionar tu confianza? Otra cosa que puede pasar es que quieras ganarte la confianza de personas opuestas entre ellas de modo que estarás traicionando siempre a uno de los dos. A veces en esta vida hay que elegir. Cuando eliges debes ser acorde a tu elección y no demostrar arrepentimiento… la confianza se basa en eso.

La amistad es algo que se forja con el tiempo, como una relación de pareja, todos tenemos nuestras cosillas y quien más quién menos tiene algo que molesta a los demás, pero las cosas buenas que ofrecemos a nuestra pareja o amigos están por encima de esas cosillas que nos molestan. No esperes conocer al amigo perfecto, todos tenemos defectos, se trata de encontrar a alguien cuyas cosas buenas superen a las cosas negativas. Algo en lo que puedes trabajar para ganarte la confianza de la gente es la asertividad. Seguro qeu si eres una persona asertiva, cuando digas las cosas te creerán, además de poder decirlas de forma que los demás no se ofendan por tus opiniones. La asertividad te ayudará a relacionarte con los demás y a ser capaz de trabajar por tus intereses sin descuidar los intereses de los demás.

Cómo ganar la confianza de alguien paso a paso

Aparenta honestidad:

Mira a los ojos a las personas cuando te hablan. Sé cuidadoso con lo que dices y con lo que cuentas de otras personas. Criticar a alguien puede fácilmente dar pie a que crean que en cuanto se den la vuelta les vas a criticar. Por tanto es impotante no hablar mal de otras personas para que no crean que harás lo mismo con ellas. Cuanto más discreto seas mejor. Eso es aparentar honestidad. Otra cosa es lo que hagas, pero para que te consideren una persona honesta y digna de confianza debes aparentar honestidad y ser digno de confianza. No todo son las apariencias pero este primer paso es imprescindible. Actúa siempre de forma honesta con todo el mundo y aparentarás honestidad sin problemas.

Sé alguien con quien se puede contar

Ofrécete a ayudar siempre que sea posible, si tienes que hacer algún esfuerzo por los demás está bien que lo hagas para que vean tu buena voluntad. Los demás saben apreciar esos buenos gestos, pero úsalos sin pasarte puesto que puedes asumir el rol de la típica persona que acaba ayudando a todo el mundo y no recibe nada cuando lo necesita. Aprende a ayudar a los demás y a pedir ayuda cuando lo necesitas. Esto es un comportamiento muy asertivo.

La amistad es algo que hay que cultivar, día a día, en los momentos buenos y en los momentos malos. Esto parece muy fácil pero cuántos amigos desaparecen cuando tienes un problema? Entonces es cuando te encuentras solo. También ocurre al revés, que mientras todo te fue mal tenías allí a un amigo que desapareció muerto de la rabia o de la envidia cuando las cosas te empezaron a ir mejor. Puede que tenga sus problemas y que no esté de humor para celebrar, pero igual que las penas de tus amigos te entristecen, sus alegrías deben poderte alegrar y hacerte olvidar de tus  propios problemas. Si no eres capaz de hacer esto no serás un buen amigo.

Sé una persona asertiva

No se trata solo de ser honesto sino de saber decir las cosas de la mejor manera posible. Si te consideran una persona sincera que siempre dice lo que quiere decir y que hace lo que quiere hacer cuando te ofrezcas a ayudar a alguien o le digas que sí cuando te pida un favor y digas que sí, sabrán que lo dices sinceramente. La sinceridad es buena siempre y cuando se tenga el tacto necesario para decir las cosas de forma que no ofendan a los demás. La asertividad te enseña precisamente a hacer esto.

La honestidad es un valor muy adecuado para un buen amigo, con honestidad nadie se puede molestar contigo, pero cuidado ser honesto no significa ser desagradable o decir las cosas de forma brusca. Saber aconsejar a tu amigo es lo mejor que puedes hacer y hacerlo con honestidad y buenas intenciones es la única forma de hacerlo bien. Si acompañas a tu amiga de compras y no le quedan bien los vaqueros díselo, pero no le digas que tiene un trasero como una plaza de toros, ayúdala a buscar algo que se adapte a su figura y con lo que la veas bien.

Reírte de los defectos de tus amigos a sus espaldas o cuando te enfadas con ellos no es una buena forma de cultivar la amistad y de ganarte su confianza. Debes ser capaz de llevar la asertividad a todos los campos de tu vida, empezando por el personal para relacionarte con tu familia y amigos de la forma más sana posible.

La asertividad es un valor, una cualidad que nunca está de más en  ninguna persona, que te hará ser mejor jefe si lo eres o algún día llegas a serlo pero que también te ayudará a relacionarte con tus compañeros y tus superiores y evitar que te hablen mal o se pasen contigo. Aplicado a la amistad es un valor totalmente recomendable así que echa un vistazo a nuestro curso Cómo ser asertivo.