Cómo ser feliz sin hijos

Tener hijos no es una obligación. A muchos os parecerá evidente pero para otras personas puede resultar hasta ofensivo. Sé que tenemos lectores de muchos países diferentes en los que la cultura y la sociedad son muy distintos, tenemos en común la lengua y poco más… Son varias las razones por las que una persona puede no tener hijos. No es el propósito de este artículo analizarlas todas pero sí ver un poco qué distintas situaciones pueden llevarte a hacerte mayor sin que hayas tenido hijos.

Si has tenido hijos y lees esto puede ayudarte a entender a otras parejas que no los tienen y a saber cómo tratar el tema con ellos ya que no todo el mundo que no tiene hijos ha sido por decisión propia. En muchas ocasiones los hijos no llegan, la naturaleza lo impide y se nos pasa la edad sin que hayamos cumplido ese sueño, si es que lo era, o sin que hayamos podido dejar descendencia. Para muchas personas que desean tener hijos no poder tenerlos es algo muy duro así que lo mejor es no preguntar demasiado las razones que tiene la gente para no tener hijos.

Puede que tuvieran una ruptura de pareja en la edad ideal para tener hijos, que les costara rehacer su vida y que cuando encontraron otra pareja ya no fuera el momento. Puede que toda la vida hayan vivido de forma precaria a nivel económico y que hayan preferido esperar a que mejorara la cosa hasta que ha sido tarde.  Puede que una de las dos personas de la pareja no quisiera tener hijos, puede que los dos estuvieran de acuerdo en ello. Son muchas las razones, voluntarias o involuntarias por las que una pareja no tiene hijos, los demás poco podemos hacer más que respetarlo y no preguntar ni meternos en sus vidas.

Cuando tienes hijos o ves a todo el mundo a tu alrededor que los tiene te planteas que es lo más habitual, lo más normal que llegado a cierto punto de tu vida tienes hijos, pasas un montón de años cuidándolos y cuando son mayores se van para venir a verte los fines de semana y algo más tarde traerte a tus nietos. Te planteas que cuando te jubiles tendrás una buena ocupación ayudando a cuidar de tus nietos, pero todo eso falla cuando no tienes hijos y tu visión de la familia y la pareja tiene que adaptarse a la nueva situación.

No tener hijos, si es lo que querías es duro, pero eso no quita que no puedas llevar una vida totalmente plena y feliz con tu pareja. Se puede perfectamente ser feliz sin hijos aunque fuera lo que más te apetecía del mundo. Las parejas se quieren y se lo pasan bien juntas y los hijos si lo miras fríamente desde la distancia ocupan una parte pequeña de tu vida. Te necesitan mucho los primeros, 10 años luego pasan cada vez más de ti hasta que se marchan de casa definitivamente.

Quiero decir que no puedes arruinar toda tu vida pensando en esa década que no has vivido con ellos. Puedes crear otro tipo de relaciones y tener otro tipo de familia distinta a la que pensabas. Cuando seas más mayor puedes recibir a tus amigos, sobrinos y familia en casa igual que harías con tus hijos y sus parejas. Que no es lo mismo pero la motivación de cuidar de alguien, de querer y de que te quieran la puedes encontrar ayudando a la gente o creando un buen entorno de amigos.

En cuanto a la relación de pareja, los hijos se llevan una gran cantidad del presupuesto familiar, si no tienes hijos podrás hacer cosas que con ellos jamás podrías hacer. Viajar, salir, ir al cine, quedar con amigos… Tu vida puede ser mucho más activa y mucho más rica de lo que sería si tuvieras hijos. Los padres son conscientes de ello, dicen que les compensa pero son conscientes de que quedan en un segundo plano y de que su diversión y sus necesidades se aplazan hasta que vengan tiempos mejores, los niños sean más mayores, etc.

No tener hijos, pues te permitirá vivir la vida como quieras vivirla, sin tener que aguantar trabajos que solo aguantarías por la responsabilidad de la familia que depende de ti, viajando donde quieras, la época del año que quieras y haciendo el horario que te de la gana. No tener hijos te permite decorar tu casa como quieras y no tener que limpiar y recoger como cuando hay niños pequeños. No tener hijos permite a muchas personas trabajar de lo que quieren sin remordimientos y sin descuidar a nadie.

Muchas veces tenemos hijos porque toca pero no estamos dispuestos a renunciar a nada. Queremos tener hijos y ser directivos para viajar mucho y trabajar 15 horas al día a nuestros hijos les crían las abuelas, las niñeras… pero hemos cumplido y tenemos hijos. «Disfrutamos» de ellos el fin de semana cuando tenemos tiempo pero ¿y ellos? Muchas de estas personas que tienen hijos porque toca pero no renuncian a nada hacen que las renuncias las practiquen sus hijos y es lo más egoísta que se me puede ocurrir. Gente que tiene que trabajar tanto que no pueden criar a sus hijos y que les mandan a vivir con la abuela. Las renuncias las hacen los niños no ellos, está claro que hay que comer, pero a veces no somos realistas con nuestra situación. Hay personas que prefieren no tener hijos que hacerles vivir una vida de renuncia.

A pesar de tenerlo claro se preguntan si pueden ser felices sin hijos ya que la sociedad parece indicar que una mujer no es completa sino es madre. Pero creo que las parejas si se quieren y si tienen cosas en común pueden ser igual de felices que si hubieran tenido hijos. Puede que los que tienen hijos no les entiendan, pero también es probable que en muchos momentos se les envidie… Está claro que la vida está llena de renuncias y quien tiene hijos renuncia a unas cosas y quien no los tiene renuncia a otras. Pero la felicidad no está reñida con no tener hijos. Una pareja puede ser muy feliz sin llegarse a aburrir nunca uno del otro sin haber tenido hijos. Eso sí, se tengan o no se tengan hijos hay que saber cuidar de la pareja y vivir para ser felices y hacer feliz al otro.