El sufrimiento

¿Sabes lo que es el sufrimiento? ¿Alguna vez has padecido por tener un plato de comida en la mesa de tu casa? ¿Alguna vez has llorado de impotencia sabiendo que nada se puede hacer para mejorar tu situación actual?

Si estás leyendo este artículo que has encontrado a través de internet, es muy probable que hayas buscado esta información porque tienes un ordenador con internet, o sea, te puedes dar el lujo de hacer eso.

¿Qué significa? Significa que muy probablemente no conozcas el sufrimiento. Pero digo ‘’probablemente’’. Tal vez sí hayas vivido el sufrimiento en el pasado ya sabes a lo qué me refiero.

Pero si no lo has vivido en carne propia y no solamente con la falta de alimentos o con la mala situación de tú familia, sino también con la falta de muchas cosas en la vida que no te permiten estar más cómodo o cómoda con tu situación actual.

Definitivamente no es sufrimiento cuando lo tienes todo y de pronto te pones a llorar por cualquier estupidez que no tengas debido a tu enorme capricho.

Es realmente penoso saber que muchas personas pierden todo el tiempo de sus vidas sufriendo en vano, sufriendo por cosas que no valen la pena, sufriendo por cualquier tontería. La vida se les ha dado así de fácil y de pronto piensan, de manera inconsciente, que todo se tiene así de fácil, cuando en la vida también hay sabores diabólicamente amargos y colores fríamente oscuros.

Quien haya pasado por el sufrimiento de verdad sabe a lo que me refiero. Sin embargo el sufrimiento es parte de nuestras vidas.

Si no conoces el sufrimiento, realmente no has vivido

¡Qué gran verdad! Los antiguos chinos tenían un símbolo como ley del universo entero. Este símbolo es el famoso Yin-Yang y representa dos cosas de la vida totalmente opuestas que pertenecen a una misma cosa. Por ejemplo: salud y enfermedad, noche y día, bien y mal.

No hay alegrías sin llantos en la vida. No hay sonrisas sin lágrimas cuando estás emprendiendo el gran viaje de tu vida. No hay satisfacción sin sufrimiento cuando estás luchando por tu sueño. No hay día si no existe la noche, tampoco no hay personas buenas si no existen las malas.

Todo esto tiene una lógica innegable. No tenemos que renegar de ella, simplemente aprender a armonizar bien con nuestro universo.

¿Y por qué escribo estos versos? La respuesta es obvia: No me siento totalmente bien pero sé que estoy aprendiendo en este proceso.

Cuando sabes que en tu familia no hay las suficientes posibilidades económicas, cuando sabes que depende de ti y únicamente de ti para que salgas adelante ya que tus padres no pueden apoyarte con dinero, es allí cuando tienes que sudar, cuando tienes que sufrir por lo que tanto anhelas.

Es ahí cuando te das cuenta de que tienes una vida por delante para ser feliz, luchar y prosperar.

Es ahí cuando te das cuenta que eres una persona con mucho potencial y, sobre todo, una persona que conoce el sufrimiento.

Conoce el sufrimiento

El sufrimiento es indispensable en nuestras vidas, es lo que nos hará apreciar mucho más las cosas que tenemos y las que no tenemos. El sufrimiento es lo que te motivará a conseguir lo que no tienes.

Se dice que muchas veces el sufrimiento que la humanidad siente es en vano. Sí, muchas veces, pero hay veces en que es inevitable sentirse mal, triste, amargado y frustrado. Hay veces que dan ganas de golpear el muro de tu cuarto y gritar al mundo: ‘’¿Por qué a mí?’’

Las grandes estrellas lucharon por conseguir lo que tienen ahora, a base de mucho esfuerzo. Ellos mismos dicen que han sufrido por lo que tanto han querido. Y es que cuando no tienes lo que realmente quieres en la vida, sufres.

¿Pero qué es mejor: desear, desear y morir amargado por no haberlo conseguido; o desear y luchar, sufrir si es posible pero al final morir satisfecho sabiendo que, aunque quizás no lo has conseguido, lo has hecho luchando hasta el final? E allí tú decisión, la mía es luchar y no importa el sufrimiento porque pronto acabará.

Existe la remota pero visible esperanza de que algún día el sufrimiento termine completamente o en la mayor parte que ya ni siquiera lo sintamos. Es cuestión de ir acostumbrándose y de decidirse en buscar algo mejor, que esto no puede seguir.

Nos merecemos lo mejor que se dé en este mundo. Si muchas otras personas han reclamado al universo lo que les pertenece, ¿Por qué no yo, por qué no tú?

Si en estos momentos estás sufriendo, entonces ¡qué bien! Yo no te puedo consolar, tú sólo tienes que afrontarlo, tienes que vivirlo en carne propia para que sepas qué es la vida. La vida no es color de rosas todos los días, también requiere acción, emoción y, sobre todo, sufrimiento.

Nos vamos a amargar si no avanzamos por culpa del sufrimiento, por ello no tienes que permitir que nada te pare. Las personas que están a tu alrededor, especialmente las envidiosas, te van a querer ver sufrir, que eso no te pare. Ellos se quemarán de odio y envidia, sin embargo tú sigues adelante.

Que los problemas son muy grandes… Entonces sal a pasear para despejar tu mente por un momento y darle un buen descanso y que eso te permita pensar con mucha más claridad para que pueda resolver mejor los problemas del día a día.

Como ves, el sufrimiento no es gran cosa. Somos nosotros quienes le damos importancia al pseudo-sufrimiento que es causado por nuestra imaginación, por nuestros pensamientos, cuando en realidad hay muchas otras personas que quieren estar en tu posición. Madura para que te des cuenta de que lo tú no sientes es sufrimiento, simplemente es una falsa percepción de la realidad. (Recuerda que hablamos de sufrimiento superficial, cuando exageramos los problemas, obviamente hay sufrimientos graves que, por desgracia, nos toca vivir)

Tienes toda una vida por delante, es de tu deber aprovecharla al máximo.

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