Una relación traumática, hace que el cerebro aprenda a rechazar las cosas que le causan trastorno y puede llevar a un cambio de personalidad en el individuo. Muchos se vuelven mujeriegos en calidad de revancha y tardan mucho tiempo en sanar.
Las relacione toxicas suelen cambiar la forma de pensar de quien las sufre, se decepcionan y luego se cansan de tener una vida sin esperanzas, sin norte y su visión del mundo al fin cambia.