Para la gente hiperactiva como yo la natación es mano de santo. Después de hacer unas buenas 25 piscinas, al volver a casa me siento tranquilo, relajado y me cuesta mucho menos conciliar el sueño.
Para la gente hiperactiva como yo la natación es mano de santo. Después de hacer unas buenas 25 piscinas, al volver a casa me siento tranquilo, relajado y me cuesta mucho menos conciliar el sueño.