Si quieres que vuelva, jamás le retengas. Practica el desapego emocional, invítale tú a irse a él/ella y jamás impidas que se vaya. Entonces ocurrirá la magia: regresará rogando a ti.
Si quieres que vuelva, jamás le retengas. Practica el desapego emocional, invítale tú a irse a él/ella y jamás impidas que se vaya. Entonces ocurrirá la magia: regresará rogando a ti.