Este escrito es una breve crítica constructivas ha estrategias que por mi parte considero bastante tontas. ¿No son las empresas las que controlan países y las que tienen millones y millones?
¿Para ayudar al tercer mundo que hace falta? DINERO. La ayuda es una palabra muy bonita pero cuando trabajamos nos gusta hacerlo de forma remunerada, si es simplemente un afición será eso, algo que haremos a tiempo libre.
Cualquier afición que no sea remunerada si no es qué te apasiona está condenada al fracaso. Está muy bien hacer las cosas por pasión, pero seamos honestos, si cobras por ello no vas a perder tu espíritu, en todo caso lo mejorarás ya que el dinero te motivará más y más.