Nuevos hábitos para liberar la ansiedad

¿Te sientes nervioso con frecuencia? ¿Piensas que no puedes llegar a todo y te sientes mal contigo mismo? Si tienes un sentimiento de vacío que no puedes llenar de ninguna manera, es posible que tengas mucha ansiedad.

Tomarte la vida con más calma es una de las cosas que puedes hacer para evitarla, también recuperarte de esta mala racha aumentando tu autoestima o va a ser imposible que dejes de sentir ansiedad si no confías en ti mismo por culpa de la baja autoestima.

Ansiedad y falta de autoestima están relacionadas ya que la ansiedad te lleva a creer que no eres suficientemente bueno para hacer las cosas bien, cuando otros las hacen y este tipo de pensamientos. Antes que nada, plan de choque contra la ansiedad y un buen refuerzo de la autoestima, para ello te recomiendo nuestro audio curso Cómo aumentar la autoestima .

Empezar el día con calma.

Si te levantas con el tiempo justo, lo normal es que tengas que empezar el día corriendo, a ritmo rápido por lo menos, ya no hablamos de cuando te despiertas tarde o con poco tiempo. Sé que todos vamos liados y que el tiempo es algo que escasea, pero precisamente la ansiedad viene muchas veces por el exceso de cosas que tenemos o queremos hacer y el poco tiempo disponible para ello.
Es bueno, para evitar la ansiedad, empezar el día dedicándote un momento íntimo, solitario, silencioso, en el que puedas desayunar, tomar una infusión, un té, algo que reconforte y te haga entrar en calor y te permita pasar un rato de relax.

Sé que puede parecer una locura poner el despertador antes para sentarse a esperar a que se enfríe la infusión y tomártela tranquilamente. Pero si lo haces, empezarás el día de forma mucho más relajada y habrás tenido tiempo para pensar en ti, planificar o desechar cosas que no puedes asumir. No podemos con todo, cuando antes lo asumas, mejor.

Por la mañana es un buen momento para desconectar, o para reconectar, según prefieras. Puedes elegir la infusión y la sesión de pensamientos y reflexiones, simplemente prepara el día, con toda la calma que sea posible, no planifiques un exceso de cosas, sé generoso con el tiempo que necesitas para hacer cada tarea y tira por lo alto en lugar de pensar que lo harás más deprisa y tirar por lo bajo. Haz que te sobre tiempo, reduce tus tareas tanto como puedas.

Otra opción es leer por las mañanas, para desconectar, para meterte en un mundo distinto al tuyo, darte un tiempo antes de empezar la actividad diaria te ayudará a despertarte del todo antes de poner el cerebro en marcha y de acelerarte el pulso con los problemas diarios.

Medita para evitar la ansiedad

Puedes probar la meditación. Funciona tan bien que tu vida cambiará por completo, pero tienes que tener paciencia, creer en ello y darte tiempo.

Meditar, al contrario de lo que cree mucha gente, no es pensar profundamente en algo sino todo lo contrario. Se trata de evitar pensar, por lo menos de no hacerlo de forma consciente. Dejar la mente en blanco es casi imposible, necesitas mucho entrenamiento para ello, pero tienes que buscar la forma de evadirte, de dejar de pensar en nada en concreto, para relajar tu mente. Los beneficios de la meditación van más allá de la ansiedad y pueden llegar a cambiarte la vida si la aplicas de forma constante y correcta.

Una meditación muy sencilla que puedes hacer es la de caminar. Ves andando a los sitios y trata de no ir deprisa, haz pasos relajados y respira profundamente. Cuenta los pasos que haces con la inspiración, que debe ser tan larga y lenta como puedas, y después los pasos que haces cuando saques el aire, tienes que conseguir que sean los mismos que cuando el aire ha entrado. De este modo te concentras en andar lento, o sin prisa, de forma relajada y en respirar. Nada ocupa tu cabeza, la respiración relajada ayuda a evitar la ansiedad. Es algo que puedes practicar cuando te sientas especialmente ansioso. Para y respira. Tan lento y tan profundo como puedas.

Si meditas al amanecer y al anochecer tu vida puede cambiar por completo, insisto porque es así. Pruébalo y me cuentas.

Olvídate de todo

Otra cosa que puedes hacer para liberar tu ansiedad son las listas. No guardes en la cabeza cosas innecesarias, apúntalas, usa las alertas de tu teléfono móvil, lleva contigo alguna aplicación de gestión de tareas y vuélcalo todo en ella. Todo lo que se te pase por la cabeza lo apuntas, no retengas nada. Si lo tienes todo con sus alarmas no te preocupes porque se te olviden las cosas. Se trata de liberar memoria, como en los ordenadores. Si liberas, el resto de procesos funcionarán mejor.

Si tienes en la cabeza mil cosas que tienes que hacer nunca podrás liberarte del agobio pues siempre tendrás cosas pendientes, y las recordarás.

David Allen, que es un gurú americano en el tema de la organización personal y de la productividad ha creado un método, un conjunto de consejos que funcionan muy bien para ser más productivo, y que se conoce como GTD (Get Things Done) en español se ha traducido como Organízate con eficacia, recomienda en su método la técnica de las listas. Propone que anotes todo, absolutamente todo, lo que esté pendiente en tu vida. Después la analizas y eliminas todo aquello que no vas a poder asumir. El resto, lo organizas de nuevo en categorías, pones fechas límite y te pones tus alarmas. Y te olvidas de la lista. Esto va a evitar que te sientas ansioso o te sientas mal por no llegar a todo lo que tienes que hacer.

Lo malo de sufrir ansiedad son todos los sentimientos negativos que conlleva hacia uno mismo. Es una gran manera de minar tu autoestima y dejarla por los suelos. Te recomiendo que sigas nuestro audio curso Cómo aumentar la autoestima para afianzar tu autoestima en el que obtendrás recursos que podrás utilizar a lo largo de tu vida para no permitir caer de nuevo en el menosprecio de uno mismo, no hay nada peor que eso. Si tú no te valora, no lo va a hacer nadie.