Cómo sé si tengo fobia social

La fobia social está directamente relacionada con el miedo, la inseguridad y la ansiedad. Si te preguntas cómo sé si tengo fobia social debe ser debido a que presentas una serie de características, problemas o temores a enfrentarte a distintas situaciones sociales.

Puede que creas que lo que en realidad te pasa es que eres tímido o tímida, pero cuando este sentimiento lo llevas al máximo y te impide relacionarte con normalidad con los demás podemos estar hablando de una fobia social. Para que nos entendamos, el tímido es una persona insegura y que tiene reparo en hablar con los demás, es excesivamente prudente, puede pasarlo mal, claro está pero es algo que se acepta y se controla de forma más sencilla.

Una persona con fobia social teme cualquier tipo de situación en la que tengas que interactuar con otras personas. Modifican su conducta y sus hábitos con tal de no enfrentarse a las situaciones que les producen pánico. Podríamos ver la fobia social como una timidez llevada al extremo.

Ambas cosas se pueden solucionar con un poco de entrenamiento psicológico y una buena introspección, si bien es cierto que un tímido lo superará más fácilmente que una persona con fobia social, puesto que en este caso no solo implica un carácter sino que éste le impide tener una vida normal. Para superar tus problemas de sociabilidad te recomiendo nuestro curso Cómo superar la timidez y ser sociable, en el que aprenderás a controlar una «simple» timidez o controlarás tus miedos irracionales de enfrentarte a determinadas situaciones sociales.

Para saber si tienes fobia social tienes que pensar en cómo reaccionas en determinadas circunstancias, las personas con fobia social pueden tener muchos síntomas físicos que les impiden actuar con normalidad.

Un tímido no necesariamente tiene que tenerlos ya que una cosa es que prefieras no hablar en público y otra que tu cuerpo te lo impida totalmente.

Las personas con fobia social presentan síntomas físicos como por ejemplo la sudoración excesiva. Manchan la ropa de sudor, les sudan las manos y son incapaces de saludar a nadie con un apretón de manos.

Además todos estos síntomas les hacen sentir más inseguros todavía ya que son conscientes de ello. Si saben que van a tener que saludar a alguien no dejarán de sudar, cuanto más lo piensen más le sudarán las manos.

Otros síntomas físicos pueden ser la sensación de ahogo, muy típica de la ansiedad que nos lleva a respirar con la parte superior de los pulmones y aún y así sentimos que no los hemos llenado suficiente.

Además pueden sentir cómo se acelera el corazón, parece que les va a salir por la boca. Taquicardias y temblores de manos que ponen de manifiesto cómo de nerviosa está esa persona. Incapacidad para hablar, la boca se seca y somos incapaces de pronunciar una palabra.

Además, como la tensión aumenta, es muy probable que sientas mareos o zumbidos en los oídos.

Si tienes estos síntomas cuando, por ejemplo, tienes que entrar en un sitio donde no conoces a nadie, o preguntar algo a un desconocido o simplemente enfrentarte a un grupo de gente como tu compañeros de trabajo estamos hablando de que sufres una fobia social.

Puede que tengas una fobia mucho más concreta. Hay personas que no soportan comer en público. Solo la idea les hace vulnerables, sienten que los demás pueden juzgarles, que les harán hablar y no sabrán cómo actuar con la boca llena, sienten que luego no podrán hablar con nadie debido a su mal aliento o a los restos de comida en los dientes. Hay personas que tienen verdaderos problemas para acudir a una comida de negocios, por ejemplo.

Los más típico es que sientan miedo a ser rechazados, o peor, a que se rían de ellos, a hacer un gran ridículo. Las personas con fobia social temen hacer algo que les haga pasar un mal rato delante de mucha gente. Son incapaces de asistir a una reunión sin ponerse nerviosos o sin sudar, por ejemplo.

Además suelen tener problemas de autoestima que les llevan a pensar que no son suficientemente buenos para hacer esas cosas de las que tanto miedo tienen. Si tienen que conocer gente nueva creen que no son interesantes, si tienen que hablar en público creen que van a aburrir a su audiencia o que no van a saber expresarse.

Muchos de nuestros miedos son naturales y totalmente normales, otros son irracionales e infundados. Yo, por ejemplo,  temía las alturas. Luché por superar mis miedos con una práctica de choque.

Quiero decir que hay una serie de miedos con los que podemos luchar si queremos, bueno, en general contra todos. Pero hacerlo con unos es mucho más necesario que con otros. Como soy muy deportista mi solución para no tener miedo a las alturas fue escalar. Sí, empecé con paredes pequeñas en un club de escalada y poco a poco fui aumentando mi nivel hasta que escalé una montaña. Las vistas desde arriba eran espectaculares. Claro que tengo miedo a caerme, ¿quién no lo tiene?. Pero una cosa es tener miedo a caerse, que te llevará a asegurar bien las cuerdas y a practicar el deporte con más precaución y otra es que ese temor te imposibilite hacer cosas como estar en un balcón de un quinto piso. Supongo que veis la diferencia.

Gracias a haber superado ese miedo puedo subir montañas, ya sea andando o escalando y disfrutar de la tranquilidad, la vista, los sonidos, la energía que encuentras en la cima. Ahora no entiendo cómo pude pasar una época con ese temor.

Con la fobia social pasa un poco lo mismo. Entiendo que hay cosas que serán más necesarias que otras, por ejemplo tienes que superar el miedo a hablar con la gente, y eso será prioritario antes de plantearte dar una conferencia ante un público extenso. Primero hay que superar los miedos que imposibilitan que tengas una vida normal y poco a poco ir venciendo el resto, como un reto personal.

Piensa qué es lo que más te inhabilita en tu vida diaria y trabaja ese punto. Poco a poco podrás ir superando todos tus miedos, cuando vences el primero hacerlo con los que lo siguen es más fácil. Para ello te recomiendo nuestro curso Cómo superar la timidez y ser sociable en el que encontrarás trucos y recursos para darle la vuelta a esta situación que te angustia tanto.